Criaturita
de Dios, que llegaste sin invitación, te adoramos con fruición y te damos
cariño.
¿Qué será de ti?
¿Qué será de ti?
Tu
madre apenas se da cuenta de tus necesidades, mientras recorre aun su tierna
juventud sin objetivos. Para ella, solo se trata de sobrevivir en desventaja. Encima,
actúa de forma errada.
Tus
abuelos te dan aquello otro que te falta: amor, dedicación, contención… tiempo.
Vives
en un mundo desnaturalizado: ingieres leche industrializada, comida
industrializada, bebida industrializada, remedios de laboratorios, vistes ropa
industrializada; nadie conoce bien de qué están hechos cada uno de ellos.
Respiras
humo. Quizá nunca pises un bosque…
¿Qué
será de ti?
Te
espera el arduo camino del aprendizaje extremo, sin garantías de escapar de la pobreza,
que acecha cada vez más.
Acurrucada
en un rinconcito de nuestro corazón, la Fe nos dice que podría darse el milagro
y que el mundo cambie para mejor…
Tu
dulce e inocente mirada nos desarma; ¿cómo seguirá tu vida, cuando ya no
estemos los últimos sobrevivientes de aquel tiempo mejor?
Pos tendrá que enfrentarse como bien dices a este mundo tan globalizado, contaminado y politicamente comprado por los poderosos. ESTÁ CAÑON como se dice en méxico.
ResponderEliminarun abrazo amigo
Carlos
Carlos:
EliminarPor supuesto que no la tendrá fácil.
La globalización ha logrado el triunfo de la división internacional del trabajo. Como nunca antes tenemos productores de materias primas por un lado, con oligarquías dominantes, países industrializados carentes de otros recursos que no sean la mano de obra baratísima y consumidores por doquier, que generan las ganancias de los grupos de poder.
Todo en un marco de sobrepoblación, automatización y agotamiento de recursos...
Pobre criaturita de Dios.
Un gran abrazo.
¿Sabes una cosa, querido amigo? Los tiempos son terribles, es verdad... hemos vivido una época que no volverá nunca, es verdad... Pero dime ¿qué se encontraron los supervivientes de las dos Guerras Mundiales, qué los de la Guerra española, qué los de tantas guerras y tantas miserias, qué los de tantos desastres? Aprenderán a luchar y a sobrevivir. Déjales un resquicio a la esperanza y armas para defenderse:amor, equilibrio, capacidad de lucha... y tantas otras cosas inherentes al ser humano y que nosotros, muchos de los que hemos vivido en la blandura, hemos olvidado. No tiene buena pinta el futuro pero ¿la tuvo alguna vez? Ahora es peor, ¿fue mejor alguna vez? No recuerdo ni una sola época en la que no nos hayamos quejado. En cuanto a la supervivencia de la Naturaleza, pues no sé qué decirte. Se adaptarán. No les quedará más remedio. Y si el mundo se acaba, pues se acabó la lucha para todos.
ResponderEliminarUn abrazo. Intentaba animarte pero me parece que hice todo al revés, y es que yo lo veo también tirando a gris marengo.
Aurora:
EliminarTengo para mí que la calidad de vida que les espera estará devaluada.
Será lo que llamamos la cultura del "aguante"; es decir, estar preparados para soportarlo todo: pérdida de derechos, de calidad institucional, de la seguridad básica, de la buena educación y alimentación...
Tras las horrendas guerras había optimismo por reconstruir ciudades, países y futuros individuales. Hoy eso no se da.
De ahí la pregunta reiterada hacia el futuro del bebé.
Muchas gracias por tu comentario.
Un gran abrazo.
Al menos, por lo que adivino, tendrá amor y no es poco. Un mimito al bebé y bienvenido a este mundo en el que, a pesar de todo, amanece cada día.
EliminarLa llegada de un niño SIEMPRE es una bendición de Dios. Todo lo que no esté "en orden" se irá acomodando por añadidura.
ResponderEliminarBesos ... con perfume de bebé. :)
María del Carmen:
EliminarEstoy entre los primeros defensores de la vida y del derecho de un nuevo ser a nacer.
En concordancia con ello, remarco nuestra obligación de velar por los más pequeños y darles las mejores herramientas para que se puedan desarrollar en la vida.
Mucho me temo que niños como los del texto corren con gran desventaja.
Mi hija tiene veinte años y ví en ella la pérdida de muchas costumbres milenarias, como embarrarse...
Un beso.
Sólo sabemos del presente, que no pinta nada bueno. Quien sabe y surge un milagro.
ResponderEliminarun abraxo!
Marilyn:
EliminarSi algo aprendí en la vida es que las cosas casi nunca ocurren de acuerdo a lo previsto.
A pesar de ello, debemos tomar ciertas precauciones, que nunca están de más. Si te preparas para lo peor, siempre estarás a cubierto.
Un gran abrazo.
Ay, me has puesto el corazón en un puño.
ResponderEliminarY es que es verdad, no sé qué mundo vamos a dejar a las generaciones futuras. Espero y deseo que hallemos una solución, porque el planeta está herido de muerte.
Por otra parte, ya los niños no tienen apenas contacto con la naturaleza y malcomen y desconocen las ventajas de criarse de una forma más libre que la que ahora se da en las grandes ciudades.
En fin..., un tema inagotable.
Un abrazo, Arturo.
Isabel:
EliminarLa descripción del problema excede -y en mucho- al simple post que edité. Lo único que pretendo es mostrar mi preocupación por el futuro de estos bebés, que nacen en desventaja, con respecto a sus abuelos y padres, que tenían mejores perspectivas.
Un gran abrazo.
Ese es un hermoso motivo para seguir peleando.
ResponderEliminarUn abrazo
Pilar:
EliminarCoincidirás conmigo en que quienes deberían conducir a la sociedad hacia mejores caminos se dedican a actividades bien diferentes.
Lo que indica a las claras que son parte del problema y no los que darán la solución.
En este contexto, los gobiernos son el reaseguro para el despojo a los ciudadanos. Ahora, ¿dónde está el problema?
Un gran abrazo.
Qué ternura y qué realismo!
ResponderEliminarIncreiblemente esa tierna y frágil criatura se "hará dura" y sabrá enfrentar todo lo que el mundo le ofrece.
Muchos nacen con la resignación de tan solo sobrellevar los reveces de la vida, otros vendrán quizás con una misión diferente; la de cambiar algo. Ojalá nuestros niños crezcan fuertes, sanos y capaces de cambiar para mejor.
Abrazos Arturo.
Genessis:
EliminarNunca sabré si tendrán éxito. Quizás sean ellos quienes logren los cambios necesarios para vivir en una sociedad más justa.
Titánica tarea les espera.
Un gran abrazo.
Los niños son una bendición. A ver, lo que pasará cuando sean mayores.
ResponderEliminarUn abrazo.
Tío Antonio:
EliminarA su debido tiempo, reclamarán las riendas del mundo; de modo que habrá que allanarles el camino lo más posible.
A mi hija de veinte trato de prepararla de la mejor manera para cuando colisione con sus ideales y sus utopías contra la realidad, esa misma contra la cual la preservé.
Espero que tenga éxito en su vida.
Un gran abrazo.
ay que difícil Arturo...
ResponderEliminarel mundo no esta fácil para nadie...
pero hay casos que estrujan el corazón...
Besos! y gracias :)
Corina:
EliminarSon precisamente esos casos complicados los que me preocupan, pues me siento del todo sobrepasado por el problema.
¿Quién los ayudarán? Veo gente solidaria, pero dirigentes llenos de imposturas.
Te garantizo que hice mi parte por mejorar esas posibilidades y a tiempo completo, pese a mis problemas de salud. Eso significa que es posible hacer mucho.
Por esas cuestiones de las compensaciones, una dama solidaria me ayudó muchísimo y sin siquiera saber ella de mi, ni yo de ella.
Un beso.
Un beso.
Cuando hay tanto amor muchas de las falencias en otros aspectos se suplen!
ResponderEliminarLo peor para una criatura es el desamor y el desapego.
Todo irá bién con abuelos así.
Es una época dura en muchos aspectos,pero hay avances buenos en otros.
Creo que muchos nos estamos "humanizando" cada vez más,acercándonos a las necesidades del otro y sobre todo de los niños y de nuestros hijos.
Confío en el futuro.
Si educamos con amor y con el ejemplo, hay esperanza!
Besos!!!!
SILDELSUR:
EliminarNo hace falta alguna para justificar el hecho conocido del incremento en el número de niños que nacen en hogares disfuncionales, donde los roles fundamentales de madre y de padre no son los óptimos. No es lo mejor y eso se nota en la evolución de los pequeños.
Si a esto le sumamos los problemas de sus padres -según describe el texto, tebndremos un panorama complicado.
Niñ
...Y ni hablar de este mundo tan virtual que se nos viene encima..ya no vamos a hablar con nadie en un banco, ni en un supermercado..etc. toda esta tegnologia que lo hace todo tan pero tan automatizado.las familias dentro de sus casas hablando entre si a travez del cellular or IPOD...Desde aca, EUA lo veo todo muy materializado, Se va acabando la generosidad,la mano que te ayuda..Todo lo resuelve una computadora.y "El quitate Tu para ponerne Yo." ( Podremos salvarnos que el mundo mejore economicamente pero espiritualmente lo veo en una decadencia super devastadora)
Y si vamos mas alla y hablamos del daño tan inconciente al medio ambiente...Ahi si hay tiras por donde cortar.... A donde iremos a parar?
En fin...que me he quedado por aca...Un blog interesante..te invito a pasar por el mio un blog con un poquito mas de calorsito...todavia...ja ja ja
Un calido saludo desde la distancia. http://youtu.be/La_69LgJAek
Idolidia:
EliminarMuchas gracias por tu visita y por tu comentario. Eres bienvenida a este espacio virtual, donde amablemente se opina, por lo general, a partir de diversas cuestiones que planteo en mis escritos.
No pude ingresar a tu blog, pues a través de tu nick solo llego a tu página de Google+. Te agradecería que me hicieras llegar la dirección de tu blog.
Con relación al tema que tocas y que llegó para quedarse, he visto que la tecnología se utiliza sin provecho. Solía hacerle ver a mi hija que, pese a que poseer una netbook no es algo tan oneroso, en su colegio no le daban uso para el aprendizaje.
Si esto sucedía en una institución de las mejores en la zona, ¿qué queda esperar para los lugares más pobres?
Te envío un gran abrazo.
Hola, Arturo.
ResponderEliminarHay dos caminos definidos: las familias que siguen tomándose el tiempo para educar y las que no. Hoy ya no se habla en los colegios de padres sino de familias. Ya no es como en los viejos manuales familia tipo; hay de todo. Hay familias que ponen mucha pasión por educar, que resisten, que siguen mandando a sus hijos con una rica merienda casera y otros que van con las patitas en un tupper. Ya. Dos anécdotas que pintan estos extremos. Una pasó en casa. Vino una amiga de Camila a casa y preguntó "¿Qué es ese olor en la cocina? ¡Qué rico!" Era sopa, sopa casera. La mamá no le hace sopa casera. Le dije "Bueno, cuando quieras comer sopa casera te venís con Cami.";)
La otra en el cole. El 21 de marzo, típico trabajo sobre el otoño. Más de la mitad *MÁS DE LA MITAD* preguntó "¿De qué color pintamos las hojas?" Entonces les dije "¿Y ustedes qué creen? ¿De qué color son las hojas en otoño?" Uno me contestó "No sé. Siempre vamos muy apurados con mamá por la calle. No sé de qué color son las hojas." Casi me pongo a llorar de la tristeza. Entonces les pedí "Para mañana, todos traen hojas caídas de los árboles." Y ahí estuvimos reconstruyendo sensaciones. Algo anda decididamente mal. No sólo estos chicos no se embarran, no miran las hojas, entendés Arturo. Muchos chicos grandes de 8, 8 años no saben andar en bici sin rueditas (aunque tengan la super mountain bike tirada en casa), no saben atarse los cordones (porque para eso debe haber un adulto que enseñe con tiempo y ganas) y encuentro muchos chicos que cuando te dicen "No encuentro x cosa", abrís la mochila con ellos y hay comida con moho de la semana anterior en el fondo...
Da para largo, pero por algo los docentes tenemos algo que se llama ESPERANZA.
Beso grande, Arturo.
¡Hola, Sandra!
EliminarAl leer tu texto, se me hizo un nudo en el corazón. Lo que describes es parte del contexto decadente; nuestra sociedad actual se dirige hacia el abismo.
No es cierto que antes no hubiese pobreza, siempre la hubo: recuerdo que en Merlo estaban unos hermanitos -uno de ellos de mi edad- a los que les llamaban "losolorapís", pues no conocían de jabón, ni el peine, ni nada. Eran tan pobres, que el que madrugaba se ponía el único pantaloncito...
El mayor de entre ellos se llamaba José y nosotros le decíamos Cucho, como al personaje de Don Gato y su pandilla. Era un buen pibe, muy querible. A eso de los siete u ocho años se accidentó donde trabajaba (te lo juro que es cierto) y perdió índice y medio de la manito derecha (aun lo recuerdo con su pequeña mano vendada y colado en casa de mi abuela para la fiesta de fin de año). De grande, sin estudios, se hizo ratero y alcohólico. Murió de cirrosis cerca de sus cuarenta años. Obviamente, era "un cabecita negra", pero yo no lo sabía, pues era uno más de entre nosotros. A él nunca lo interrumpieron con el odioso: ¡chicos a comer!, que fastidiaba -a mi primo y a mí- en medio del partido de fútbol.
La mayoría de nosotros, en cambio, pudo alcanzar una vida más confortable que la que tuvieron nuestros padres, aunque el esfuerzo haya sido mayor y el entorno fuera deteriorándose cada vez más. Incluso hemos dado mejores condiciones de vida a nuestros hijos. El proceso ascendente no llega a los nietos, por lo general.
El texto refiere a un caso paradigmático.
¿Entendés por qué me enternecen y angustian los niños sin destino?...
Te envío un abrazo grandote.
¿Qué decirte amigo mio? Claro, las cosas no paran de cambiar, yo viví una infancia diferente a la de mis padres y mis hijas a la mía.Pero creo que al final todos nos adaptamos, igual que los animales se adaptan al medio para sobrevivir. No sufras, tus hijos, tus nietos, mis hijas, todos ellos buscarán su manera de abrirse paso;no echarán de menos las cosas que no han vivido, que no han tenido, esa pureza en el aire, o esos juguetes sencillos que nosotros teníamos. Ahora todo marcha tan rápido, es cierto que padres e hijos pasan menos tiempo juntos debido a estos nuevos roles laborales, y que son los abuelos ahora los que toman el papel de educadores. Mira, nosotros tenemos nuestra historia, y ellos algún día contarán la suya. Esperemos que Atlas no deje de sujetar a este pobre mundo y lo demás ya se verá...
ResponderEliminarPor cierto, la historia de abajo, la del burro blanco (jeje) que me ha encantado.
Ángela:
EliminarUn argumento que siempre tengo a mano es el siguiente: la Humanidad superó hambrunas, guerras, pestes y aun estamos aquí.
La cuestión es que, pudiendo haber un mundo mejor, los niños heredarán un desastre...
Las madres están obligadas a trabajar fuera de sus casas para llegar a fin de mes con los ingresos y los niños reemplazan su rol con el de una maestra, o una abuela ya mayor y sin el vigor necesario. Yo digo que el amor de la madre es insustituíble; pero, no hay opciones que permitan a un niño el poseer tal necesario cariño. Los niños hablaban con el modo, timbre de voz y léxico materno, hoy lo hacen como los personajes de los dibujos animados que ven por TV...
¡Ah!, muchas gracias por tu acotación final (con su je-je, incluido).
Un beso.
Siempre creemos que nuestro tiempo fue mejor pero seguro que nuestros padres sintieron los mismos temores cuando llegamos a este mundo, es el miedo a lo desconocido, la zozobra de no controlar todo aquello que como seres humanos se nos escapa...
ResponderEliminarSoy una persona positiva y creo en el sentido innato del ser humano para sobrevivir a todo aquello que se le presente, para bien o para mal. Ese el el mojo de la vida, creo yo.
Besos supervivientes.
Gloria.
EliminarLo importante es sobrevivir, por supuesto; soy el ejemplo viviente de ese pensamiento. Lo que sucede es que me gustaría que hubiese menos sufrimiento, al menos salvarse del que fuera evitable.
Y si así no fuera, creo que el solo don de la vida, con un instante de felicidad alcanza para justificar los tragos amargos. El 09-02-2012, en un post mío, titulado “La felicidad”, dije:
“Si algo hay cierto en este mundo es que todos hemos sido felices al menos una vez en nuestra vida.
Ese momento de plenitud nos ha marcado para siempre.
Repetir esa experiencia es nuestra meta última.
En ese intento pasaremos por diferentes momentos de dicha fugaz, de sensaciones placenteras; pero, todas ellas serán satisfacciones a medias, pues siempre quedará en nuestras mentes la necesidad de llegar a esa felicidad irrepetible.
El solo hecho de perseverar en el intento de alcanzar de nuevo esa felicidad añorada bien vale la pena de pasar por mil sinsabores.”
Te envío un gran abrazo.
los padres, en los principios que nuestros hijos van teniendo entendimiento de lo que es la vida, ellos nuestros hijos se miran casi siempre el espejo de sus padres para tratar emularlos en lo posible.
ResponderEliminarEl problema de esos niños es precisamente que el espejo tenga y refleje sentimientos humanos y morales, entonces el niño tendrá una buena base para enfrentarse a la vida.
En estos momentos los politicos les han entregado las aulas a los alomnos,y ese ha sido y será el mayor fallo del politico ,como tambien querer adoctrinar desde pequeños en los libors de texto.
Saludos
José:
EliminarSegún yo lo veo, los padres solo pueden sembrar y regar.
Luego, serán los vástagos quienes decidirán qué hacer. Así ha sido siempre.
Creo que dar el ejemplo es el mejor consejo que se puede dar a los hijos: si el padre es severo, pero cariñoso y bien intencionado, a la vez que ejemplo de su prédica, habrá hecho su parte.
Si malcría, sobreprotege, consiente vicios, habrá fallado y su hijo se lo reprochará. Como ejemplo, el golpeador es hijo de padre golpeador.
Tengo mis dudas sobre los reales motivos de la educación donde se permite la indisciplina y la vagancia. ¿Qué podrá resultar de ello? Nada bueno, por cierto.
Saludos muy cordiales.
Arturo tu pensamiento es igual que mio y como dice mi madre, una eñor mayor, yo no lo vere, pero siento lo que queda
ResponderEliminar¿que turo tienen esos bebes?.. dejo la reflexion ahi.
Un abrazo y mucho animo
María Jesús:
EliminarTengo sesenta años y muy poca salud; mi hija tiene veinte apenas, lo que significa que no sabré qué será de ella.
Sin embargo, me esfuerzo para que posea las mejores herramientas para su desarrollo.
No olvido que ella, con once meses, me recibió en brazos de mi esposa, al salir de mi primer sesión de hemodiálisis. Hoy cursa segundo año de Derecho.
Se podría decir que apuesto al futuro.
Un gran abrazo.
Olá Arthur,
ResponderEliminarOs tempos são difíceis mais o amor cuida e vence tudo.
beijos
Joelma
Joelma:
EliminarMuito obrigado pelo seu comentário.
A esperança nunca se perde e eu tenho fé que eu solidariedade, que nada mais é do que o amor ao próximo.
Beijos.
No seas pesimista Arturo, esperemos que todo vaya a mejor y esa criaturita goce, como nosotros hemos gozado, de algún árbol, un río limpio, unos prados con mucha hierba...y muchas cosas más.
ResponderEliminarSaludos
María de los Ángeles:
EliminarLa niñez, en tanto la época de la inocencia, debería ser la más feliz de la vida, pues es cuando se forma nuestra personalidad.
Hay padres irresponsables que no se preocupan, o no saben, del daño futuro a esas criaturas. Los niños no entienden, pero perciben si reciben amor y cuidados, o no.
La Humanidad ha superado crisis mucho peores que las actuales, de modo que sobrevivirá. Lo que hay que ver es a qué costo.
Un cordial saludo.
Los hijos siempre llevamos dentro algo de nuestros padres...pero yo creo que somos lo que hemos hecho de nosotros mismos.
ResponderEliminarMaestros y padres nos enseñan un camino, que como bien dices, puede ser bueno, regular o no tan bueno, pero tú, personalmente decides los pasos que vas dando.
Lo que sí es responsabilidad nuestra, de todos, es el mundo que vamos construyendo o que nos dejan construir. Yo por mi parte he intentado solamente que mis hijas sean independientes, buenas personas y con una cabeza bien amueblada que les permita pensar y razonar con sus propios criterios. Que nunca hagan un daño gratuito ni dejen de hacer un bien necesario. El resto, el cómo ellas coloquen sus muebles...debe ser personal.
Espero que estés bien, eso de la poca salud no me ha gustado nada.
Un beso amigo.
Marina:
EliminarProbablemente tengamos los mismos ingredientes que nuestros predecesores, lo que sucede es que las proporciones cambian. Seremos muy parecidos, pero diferentes, como es de diferente un postre hecho por una, u otra persona.
Uno puede educar a sus hijos en la virtud, o en la falta de escrúpulos, según sea su propia moralidad. Al ser criado en un hogar honesto, debí aprender a protegerme de la maldad a costa de golpes. Por tal razón, considero importante preparar a los hijos para que se puedan defender.
Lo de mi salud, ya lleva veinte años de lucha y de adaptación a la situación. Está escrito en mi presentación (Perfil).
Un beso, amiga mía.
En nuestras manos está darles un mundo mejor. No desfallezcamos!
ResponderEliminarSaludos!
José:
EliminarMucho me temo que apenas alcanzará para resguardar a nuestra prole.
Y es bien sabido que si el medio ambiente es inapropiado, no alcanza con la virtud personal.
Son condiciones imprescindibles la educación y la disponibilidad de trabajo honesto. Algo difícil de obtener, ya que los gobernantes se encargan de torpedearlos. Pese a todo, no abandonemos los ideales.
Saludos cordiales.
Hola, amigo Arturo: Te confesaré que yo de por sí soy un pesimista pero intento, hace mucho que lo intento, no ver siempre la botella medio vacía. Por tanto, querido Arturo, espero y deseo que siempre se pueda cambiar el rumbo de la vida, el futuro que tendrán nuestros hijos o nuestros nietos. También dependerá un poco de ellos.
ResponderEliminarLo cierto es que pinta oscuro pero siempre esperaré un poco de luz. El mundo se mueve en todas direcciones.
Un abrazo de Mos desde la orilla de las palabras.
Mos:
EliminarSe trata de una percepción personal, basada en las posibilidades de progreso observadas en varias generaciones y en mi país.
La sociedad cada vez requiere más esfuerzos, para que se alcance menos. El Estado se ha vuelto voraz y confisca porciones de esfuerzo crecientes a los contribuyentes, mientras devuelve cada vez menos en concepto de prestaciones.
La inseguridad y el narcotráfico son los dueños del espacio público. Las fábricas que otrora daban empleo a muchos miles, hoy son ruinas o espacios ocupados por viviendas precarias…
Yo puedo ser muy optimista, pero no puedo ser ciego. Allí nace mi angustia por las inocentes criaturitas de Dios.
Te envío un gran abrazo, de amigo.
Arturo... " Criaturita de Dios "
ResponderEliminarNo lo veo tan así como dices....un nacimiento da alegría,
no...¡¡ pobrecito !! solo si nace enfermo se
piensa de esa manera...y en los padres que se tienen que hacer
cargo de el...que sanito o no, Dios se los ha enviado
no se sabe el porqué...tal vez porque ha visto en ellos que
van a dar hasta su vida por el.
Cuando nos enteramos de algún embarazo, enseguida pensamos será nena o varón...
Lo que da de pensar en el mañana, es la droga, que no se la puede combatir en todo el mundo.
un beso
Doris Dolly:
EliminarCuando traemos un niño al mundo asumimos una gran responsabilidad hacia él, que se paga con el amor que sentimos y que llena nuestros corazones.
Mi desazón es ver la cerencia de esa relación amor- obligación en muchos niños y sus progenitores. Poco ayuda la crisis económica, aunque lo peor es la crisis moral y de sentimientos. Como bien dices, la droga es un flagelo al que no son ajenas varias jóvenes madres.
Un beso.
Arturo....piensa que estamos en Argentina uno de los mejores paises del mundo....pobrecitos los Siria en estos momentos y otros que estarán padeciendo una situación semejante.
ResponderEliminarCrisis económica ves tu en nuestro pais ?...aqui hay trabajo y el que no lo tiene es porque le escapa como el perro a la cebolla.
No sigo más, no me agrada estar aqui por cuestiones políticas.
Un beso
Doris Dolly:
EliminarMi estimada amiga, no tengo ningún interés en hacer que pierdas tu visión de la realidad, aunque sería prudente que prestes atención a aquellos que tienen otra opinión.
Podría ser que no te convenzan, lo que no sería un problema. Pero, sin dudas, tu visión sería más amplia.
Al menos, eso es lo yo hago, para comprender -si fuera posible- el por qué de la diversidad. Y no hablo solo de política.
Un beso.
Esa Fe escondida en un rinconcito del corazón, está en lo cierto. El ser humano tiene millones de años de experiencia y ha llegado hasta aquí. Seguro que seguirá evolucionando para mejor.
ResponderEliminarLo que para nosotros es una vida, para la evolución no es más que un fugaz instante.
Besazo
Dolega:
EliminarMi apreciada amiga, la evolución suele tomarse su tiempo y se manifiesta luego de largos períodos y un gran número de generaciones.
Si no me equivoco, a finales del Siglo XIX se plantearon el problema de la mejora de la sociedad, vía ideologías. Entonces, se planteó la necesidad de cambiar al hombre, como condición básica de ese cambio superador. No hace falta explicitar la interpretación que se hizo del súper hombre de Nietzsche y las desastrosas consecuencias que resultaron de ello.
Tengo para mí que los costosos estudios que se realizan para conocer el ADN humano, no persiguen otro fin que el de crear ese súper hombre, esa élite. Quizás alguna corporación ofrezca -no dentro de mucho tiempo- óvulos fertilizados a las mujeres que, conservando determinadas apariencias y virtudes de los progenitores, ofrezcan tener hijos inteligentes, sanos, cariñosos, con todos los atributos que se sueñan y garantidos al cien por ciento. Ya lo hacen con los animales y los vegetales. Quizás de inicio al “Mundo feliz” de Aldous Huxley.
Con un poco de suerte, no llegaré a ver tal abominación.
Me conformo con lo posible, con la diversidad, con una Humanidad natural. El sueño de Prometeo, en este caso, no es el mío.
Un besote.
A estas alturas la fe o esperanza y la interrupción de la vida son circunstancias extremas.
ResponderEliminarAl final nadie dijo que la vida, independientemente de la época en que nos tocó nacer, sería fácil.
Ojalá pudiéramos dejar un mejor mundo para los que vienen, sólo toca cumplir con nuestra parte hasta donde sea posible.
Abrazo :)
Cartoncita Rosa:
EliminarGracias a comentarios e información que me brindaron dos compañeros de oficina, tengo una idea de la realidad de dos sociedades muy diferentes: la haitiana y la danesa.
Las posibilidades de desarrollo para un niño nacido en una de ellas son muy diferentes a las de un semejante nacido en la otra. Un nivel mediocre de vida para Dinamarca, parecería todo un lujo en Haití.
Ayer nomás vi un video en youtube, donde una muchacha feliz mostraba un cuarto de hotel en Cuba. Se notaba que era su primera vez en un hotel, donde –además- no había ningún lujo. Quizás una muchacha estadounidense de clase media se sintiese incómoda en esa misma habitación.
Esto nos plantea una pregunta: ¿cuál es el nivel de vida apropiado para una persona?
Un gran abrazo.
La vida actual es el fruto de las semillas del pasado, lo triste es que muchas cosechas no se han regado con el mimo adecuado
ResponderEliminarUn placer siempre leerte
40añera:
EliminarMe gustó mucho tu comentario, pues deja claro que muchos de los problemas culturales actuales son de vieja data.
Un gran abrazo.
Ola caro Arturo,li atentamente todo teu relato e comentários dos amigos,mas acho que fiquei um pouco atrapalhada com o assunto pois as vêzes na leitura em espanhol surge muita coisa que não consigo traduzir adequadamente,mas a única coisa que posso acrescentar diante de tudo que foi dito,são duas famosas frases que englobam todo meu parecer;1-A esperança nunca pode ser perdida. 2 Muita fé em Deus.Beijos no coração. SU
ResponderEliminarMuito obrigado por ler o meu texto e comentar sobre ele.
EliminarEu imagino a sua dificuldade em interpretar o meu texto, não é uma linguagem simples, porque ele não encontrar uma maneira de simplificar as idéias, sem risco de perder a mensagem.
Você está certo em dizer que temos de ter fé e esperança.
Beijos da alma.
Cuando hayamos desaparecido, nadie le dirá que hubo un tiempo mejor de la misma forma que a nosotros ya no nos dicen que hubo dos guerras mundiales.
ResponderEliminarUn abrazo Arturo.
Jaal:
EliminarTienes mucha razón. Con la pérdida de la memoria colectiva cuentan los poderosos; los mismos que avanzan, sin prisa ni pausa, detrás de la modificación de las sociedades para su propio beneficio y en detrimento del hombre común.
Un gran abrazo..
Muchas veces pienso que si tuviera que tener hijos ahora, mi decisión posiblemente sería diferente de la que tomé en el pasado, mis hijos son siglo XX bañados con XXI, pero qué será de los puro-XXI.
ResponderEliminarPor suerte no voy a estar para constatarlo.
Un abrazo.
HD
Humberto:
EliminarEl mundo se ha vuelto demasiado competitivo, a la vez que sofisticado. Hoy, con la buena voluntad y el trabajo esmerado, apenas se sobevive.
La presión en la obtención de buenas calificaciones durante la educación será cada vez mayor; esto redundará en un mayor stress en los estudiantes.
Por último, los menos dotados deberán ocupar puestos menos calificados y peor pagos que aquellos en los que trabajaron sus propios progenitores.
Yo tampoco veré esos tiempos tan duros.
Un gran abrazo.
Por estas criaturas que no pidieron nacer, y por las que van a venir a este mundo que ahora es desesperanzador, inhóspito y frío; Luchemos pues querido amigo, luchemos con todas nuestras fuerzas y nunca rendirnos pues ellos; no merecen este futuro que se va engendrando en la tierra cual planta venenosa y maligna. Arranquemosla de raíz, no por nosotr@s , si no para salvaguardar el futuro de nuestros hijos y nietos.
ResponderEliminarY ten presente querido y admirado amigo que en el corazón mora siempre el amor , en la conciencia la dignidad y el respeto. En el alma los tesoros más valiosos que son los que hacen que la vida de por si sea amorosa y bella. Así que no permitamos que entes , pues no merecen nominarse humanos , corruptos, sin conciencia, ni corazón y alma expertos en armas y juegos de guerra , aniquilen por lo que tanto lucharon nuestros ancestros. Por el Amor, la Dignidad y el Respeto.
Miles de besinos de esta amiga con inmenso cariño .
Ozna-ozna:
EliminarEstoy de acuerdo contigo.
Nuestra lucha será de resistencia y en dos frentes: el del esclarecimiento y el del enfrentamiento.
El primero de ellos será para concientizar a la gente sobre los daños que ocasiona la inmoralidad y la falta de ética actuales, y serán nuestros interlocutores: los niños, los jóvenes o nuestros demás semejantes, en ese orden.
Complementariamente a la difusión de las consecuencias de proseguir las cosas como hoy, se tomarán acciones efectivas para oponernos a su avance, primero, para luego hacerlos retroceder. El voto responsable sería una herramienta magnífica, aunque los petitorios y campañas no serían desdeñables y ayudarían bastante.
En lo que a mí respecta y en mi sociedad, trato de hacer mi aporte diminuto, mi granito de arena, para ir en ese sentido virtuoso.
Te mando muchos besinos, como los tuyos, con gran cariño.
Ufff,amigo, me partiste el alma...de verdad. La preocupación por el futuro de esa criaturita es demasiado intensa. Y cómo no serlo en el mundo en que vivimos, pero sabes, te digo algo y quizás sienta al decirlo que no sea suficiente para ti como el escritor, pero quizás sí como el hombre y posible pariente de este bebé, que casi sin querer ha venido al mundo, y es decirte que si es una criatura de DIOS puedes tener la confianza que Él la abrigará cuando la necesite, y esto, en todas las áreas,por supuesto, no sólo abrigo físico. Yo creo mucho en Dios,aún hoy,en que muchos ya lo desecharon, y sé que Él permite estos nacimientos por muy terribles que se vean las cosas en su entorno, y que Él estará siempre a su lado, si lo busca y lo integra a su vida,por supuesto.
ResponderEliminarBello, conmovedor, y muy intenso escrito,amigo.
Mil besos,y gracias por tu siempre cercanía.
Feliz fin de semana.
Maritza:
EliminarAnte todo, te agradezco el comentario, que has escrito desde el corazón.
Si bien el niño en cuestión es ficticio, las circunstancias detalladas en el texto son reales y pudieran incluir a infinidad de pequeños.
Existe una debacle moral profunda, que se manifiesta -entre otras cuestiones- por los hábitos actuales, que propician que los adolescentes traigan niños al mundo.
El adolescente -y hablo en el general de los casos- es una persona que no ha completado aun un mínimo de aprendizaje en la vida, todavía antepone la parte lúdica a la responsable. En esas manos cae la responsabilidad enorme de la crianza.
Por supuesto que la pobreza de un niño de un país nórdico es muy diferente a la de un similar haitiano, o la sufrida por un pequeño habitante del África pobre.
Te recuerdo ese dicho: Dios aprieta, pero no ahorca; creo que en él se resumiría tu idea sobre el asunto.
Besos.
¿Qué estamos dejando a nuestros hijos? ¿lo pensamos bien? ¿una herencia de valores materiales o morales? estamos convirtiendo a la sociedad en un mundo materialista, pareciera que lo que importara es el dinero, el ser más que nadie, en cambio, no nos damos cuenta, de que lo más importante es dejarles el legado de un mundo lleno de valores morales, donde el amor prevalezca por encima de todas las cosas.
ResponderEliminarComo siempre, Arturo, tus textos siempre me hacen reflexionar.
Un beso.
María:
EliminarUna de nuestras preocupaciones es y ha sido siempre la formación de nuestra hija.
Y no hemos actuado en base a sermones, sino a ejemplos en la conducta.
En mi caso, ella sabe que no renegué ideales para proveerle bienestar, que defiendo la honestidad. También le hemos hecho saber de quienes son diferentes de nosotros: los falsos, los egoístas, los envidiosos y los obsecuentes.
Y no es fácil contrarrestar los malos ejemplos, que se han arraigado ya en la sociedad.
No obstante, vemos en otras de su edad, los males que pretendemos evitar.
Un beso.